La iniciativa desarrolla dos líneas de actuación. La primera consiste en la utilización de energía eólica y fotovoltaica para la producción de hidrógeno por electrolisis del agua, es decir, por descomposición mediante corriente eléctrica, y su almacenamiento como fuente de energía renovable. Su quemado en una pila de combustible genera la energía eléctrica necesaria para la iluminación externa del edificio demostrativo. El uso de las dos energías se debe a que "así se pueden explotar mejor las posibilidades de una zona", apunta Rodríguez Cano. Además, "hasta ese momento no había ninguna planta que produjese hidrógeno mediante las dos fuentes". La segunda línea consiste en la utilización de la energía solar para la refrigeración de este edificio a través de máquinas de adsorción desarrolladas por el grupo de trabajo.

La instalación con la que se trabaja en una zona cercana al Centro Europeo de Empresas e Innovación de Burgos en Villafría, (CEEI) Burgos, cuenta con 70 kilowatios (kW) destinados a la generación de hidrógeno, de los que 40 kW son generados por dos aerogeneradores Jimp 20 Plus de 20 kW cada uno, y otros 30 kW por energía fotovoltaica, gracias a una estación fotovoltaica fija de 20 kW sobre cubierta plana del edificio de máquinas de la instalación y a una estación fotovoltaica móvil sobre seguidor solar en dos ejes. Otra parte importante del proyecto es un electrolizador de 18 kW de potencia que se alimenta con energía eólica y fotovoltaica para generar hidrógeno y oxígeno de elevada pureza a partir del agua. El oxígeno se evacua hacia la la atmósfera y el hidrógeno se almacena a 50 bares en un conjunto de tres bloques de 16 botellas cada uno, con una capacidad de 160 m3 cada bloque. En el proceso, también se utiliza una pila de combustible que utiliza el hidrógeno almacenado para producir energía eléctrica. "Si hacemos el quemado del hidrógeno en una pila de combustible, que toma aire, extrae el oxígeno que se combina con el hidrógeno que tenemos almacenado y da como subproducto agua, que es el que consumimos en la electrolisis y como producto de reacción, energía eléctrica", expone el responsable de Hydrosolar 21.

Generación de frío


En otra parte del proyecto, la generación de frío se basa en un conjunto de frigoríficos solares diseñados por el equipo de investigación burgalés, que se basa en el fenómeno de la adsorción para transformar la energía solar en frío. La instalación consta de un sistema de 18 refrigeradores, un circuito hidráulico de condensación, un circuito de evaporación y un sistema de control. Cada uno de los prototipos de frigoríficos solares tiene una potencia estimada de 450-500 W. El sistema funciona por adsorción de metanol por carbono activo. "Al calentarse el generador de las máquinas de frío por la captación de energía solar, el carbón activo que contiene expulsa los vapores de metanol que había adsorbido la noche anterior. Estos vapores de se condensan a su paso por el condensador de las máquinas, que está refrigerado por agua. Durante la noche siguiente el líquido condensado se evapora al bajar la presión y la temperatura. El proceso enfría un fluido térmico que, almacenado en un depósito constituye el frío útil del ciclo. Así, el proceso dura 24 horas, en ciclos diarios", apunta Luis Román. Con este sistema innovador se cubre una parte de las necesidades de refrigeración del edificio.

Fuente: La Flecha
Obama, contra el cambio climático
11:20 | Author: GoNZaLVo
EE UU dio esta madrugada un decisivo paso en la lucha mundial contra el cambio climático. Tras un largo e intenso debate, la Cámara de Representantes aprobó una ley que, por primera vez, impone unos límites a la emisión de gases contaminantes a centrales energéticas, fábricas y refinerías de crudo e incluye una cuantiosa financiación para fomentar el cambio de un parqué empresarial y de transporte basado en el carbón y otros combustibles fósiles, a uno de energías alternativas, menos contaminantes. El objetivo es reducir las emisiones de CO2 en un 17% para 2020 y en un 83% para 2050 con respecto a los niveles de 2005.

Se trata de un objetivo muy ambicioso para el país más contaminante del mundo.

No es Kioto, pero casi: supone volver a la contaminación de 1990 y requiere unesfuerzo similar al que se ha marcado Europa, del 20%, para 2020.


La norma, que logró el apoyo de 219 diputados (uno más de los necesarios), creará un sistema comercial similar al que existe en otras regiones del mundo, por el que las empresas pueden vender y comprar bonos contaminantes. Según el texto propuesto por los demócratas Henry Waxman y Edward Markey, de 1.200 páginas, EE UU debería obtener el 6% su electricidad de energías renovables como la eólica o la solar en 2012.

Los líderes republicanos intentaron evitar que la ley fuera aprobada hasta ya entrada la noche, alargando el proceso de votación en casi cinco horas. El representante por Georgia Nathan Deal llegó a poner a España como ejemplo de por qué la Cámara no debería aprobar la ley. "En España, por cada puesto de trabajo que se ha creado gracias a las nuevas energías, se han destruido otros dos. Ese no es el camino", dijo. Finalmente, ocho republicanos votaron a favor de la medida en una sesión que finalizó pasadas las siete de la tarde (una de la madrugada, hora peninsular española).

Los demócratas, sin embargo, hicieron un gran esfuerzo por aprobarla. El representante John Lewis regresó a la Cámara tras haberse sometido una operación de corazón. Patrick Kennedy dejó la clínica de rehabilitación en la que había ingresado este mismo mes para tratar una adicción a las drogas. Ellen Tauscher, a la que Hillary Clinton ofreció un puesto en el Departamento de Estado, rehusó aceptarlo oficialmente antes de hoy para no tener que dimitir y no perder la oportunidad de votar.

A la ley le queda aún un largo recorrido antes de llegar al despacho del presidente Barack Obama, que la abrazó como bandera medioambiental de su campaña. Ahora, debe ser sometida a votación en el Senado, donde se espera un difícil debate entre republicanos y demócratas.

"Europa se ha adelantado a EE UU en este asunto en los pasados años", dijo ayer Obama en una rueda de prensa conjunta con la canciller alemana, Angela Merkel, mientras se debatía la norma. "Yo soy el primero en admitir que EE UU, en los años pasados, no ha estado donde necesitaba estar". Hasta la fecha, EE UU no ha ratificado el protocolo de Kioto, que establece unos límites obligatorios a la emisión de gases contaminantes.

El coste de las modificaciones que establece la nueva ley sería de 15 millones de euros anuales en los próximos 10 años. Según un informe de la Oficina de Presupuestos del Congreso, a cada familia le supondrá unos 124 euros, "porque la mayoría de la actividad económica está basada en combustibles fósiles", explican desde esa oficina.

La Casa Blanca ha apoyado la medida como una forma de crear una nueva industria basada en las energías renovables. Las perspectivas podrían ser optimistas para el corazón industrial de la nación. Ohio ha perdido 200.000 empleos en la última década. Michigan, casi 500.000.

Los proponentes de la ley, aliados con la Presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, negociaron duramente durante la mañana de ayer para poder lograr los 218 votos necesarios. Los conservadores no ven la norma con buenos ojos, porque la consideran una subida de impuestos disfrazada de ley medioambiental. "Esto es la mayor subida de impuestos de la historia de América", dijo el representante republicano Mike Pence. La Oficina de Presupuestos confirmó en su informe oficial que la ley significaría la creación de un nuevo impuesto energético sobre los ciudadanos.

Fuente: El Pais

Esta iniciativa surge de la suma de esfuerzos de la Consejería de Medio Ambiente del Principado, el Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) y Central Lechera Asturiana (CLAS).

Así lo han anunciado hoy representantes de las tres entidades en la presentación del Bosque Central Lechera Asturiana, en un acto que ha tenido lugar en la sede de la empresa, en Siero, y al que han asistido la viceconsejera de Medio Ambiente, Belén Fernández; el presidente de FAPAS, Roberto Hartasánchez, y la directora de Sostenibilidad Medioambiental de CLAS, Estefanía Iglesias.

El bosque, que formará parte del Parque Natural Las Ubiñas-La Mesa, estará formado por especies autóctonas asturianas como el castaño, el roble, el haya y las aranderas silvestres, y se espera que su plantación ayude a garantizar la supervivencia del urogallo y a fijar carbono contribuyendo en la lucha contra el cambio climático.

Hartasánchez ha explicado que este proyecto dará nuevo uso a tierras ganadas al monte hace años que se han dejado de utilizar como pastizales y a día de hoy se encuentran en fase de abandono.

Con esta reforestación se logrará una revalorización económica a largo plazo gracias a la madera que genere el bosque mientras que, durante su crecimiento, mantiene la biodiversidad y proporciona refugio y alimento a distintas especies animales.

El presidente de FAPAS ha destacado la importancia de la colaboración empresarial en este tipo de iniciativas y ha señalado que, junto con los vecinos de la zona, se trabajará de forma eficiente en la conservación de la naturaleza ya que es un patrimonio que "no pertenece a nadie" y que "debe seguir ahí" para ser disfrutado por todos.

Fuente: La Opinion Coruña